En medio del intenso debate que se ha generado por la crisis de seguridad que está viviendo nuestro país, el subsecretario de Justicia, Jaime Gajardo, afirmó que el Gobierno está evaluando la construcción de una nueva cárcel de máxima seguridad para los líderes de bandas criminales.
Sobre aquello, la diputada de Renovación Nacional, Camila Flores, hizo un llamado al Ejecutivo a “no quedarse solo en el discurso” y que la construcción de un nuevo recinto penitenciario es “un buen punto de partida” para combatir la delincuencia.
“Crear una cárcel de máxima seguridad es un buen punto de partida y desperdiciarlo sería terrible. La criminalidad que enfrenta nuestro país es muy distinta a la que teníamos unos años atrás, y, por lo tanto, tener condiciones especiales es vital”, sostuvo.
Asimismo, la parlamentaria manifestó que “esto se está haciendo ya en otros países, por lo tanto, la experiencia comparada señala que es una alternativa exitosa y sobre todo necesaria para bandas de crimen organizado que son peligrosas, especialmente en la ejecución de los delitos, dado el alto poder de fuego y lo despiadados que son a la hora de actuar”.
“Hoy hay que asumir que existen nuevos tipos de reclusos que son más peligrosos, que tienen otros modus operandi y que, por el bien de nuestro país, deben estar en cárceles especiales que aseguren su aislamiento”, expresó Flores.
En cuanto a la realidad del sistema carcelario en nuestro país, la congresista indicó que “en este momento existen cerca de 47.000 personas privadas de libertad y nuestra capacidad es para 42.000 personas. Esto evidencia el alza de delitos y la necesidad imperante de crear nuevos establecimientos penitenciarios”.