El Colegio de Profesores presentó este lunes una carta dirigida al ministro del Interior, Andrés Chadwick, para que se investigue el actuar policial frente a un paro de “brazos caídos” de docentes que se mantiene, por más de dos semanas en Punta Arenas, sumado ello a protestar por “la fuerte represión sufrida por los estudiantes del Instituto Nacional”, según indicó el magisterio.
Además, el colegio anunció que evalúa recurrir a organismos internacionales por vulneración de derechos sindicales y de la infancia y la adolescencia.
Según los antecedentes entregados por el colegio, los profesores movilizados de Punta Arenas “sufrieron la visita de Carabineros a cada una de las escuelas de la comuna, en las cuales se empadronó a dirigentes gremiales con sus datos personales”.
Se trata, acusan, de “una práctica de amedrentamiento policial inédita en democracia en Chile y se suma a la fuerte represión que sufrieron estudiantes del Instituto Nacional en la misma semana”.
“Exigimos que se ponga término a esta política represiva que se ha manifestado estos días y que, a nuestro entender, no es casual ni son hechos puntuales. Con lo que ocurrió en el Instituto Nacional, lo que ocurrió en algunas manifestaciones previas, donde ya habíamos denunciado una desproporcionada reacción policial, y lo que ocurrió en Punta Arenas nos parece una política de represión al movimiento social que nos recuerda los tiempos de la Dictadura”, dijo Mario Aguilar, Presidente del Colegio de Profesores.
“Creemos que esto no solo tiene un impacto en relación a la política de amedrentamiento al profesorado, sino que también en torno a cuál es el mensaje educativo que se les está dando a los actores que ahí conviven”, planteó Eduardo González, tesorero del gremio.
“El mensaje es bien claro a nuestros propios estudiantes: aquellos que se organizan por luchar por defender sus derechos, esta es la respuesta que van a tener por parte del Estado, la represión y no la posibilidad de dialogar”, añadió González.