La Corte de Apelaciones de San Miguel decidió acoger un recurso de amparo presentado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), en favor de ocho jóvenes residentes del Centro de Reinserción de San Bernardo, dependiente del Servicio Nacional de Menores (Sename).
El INDH recibió la denuncia respecto de un patrón generalizado de violencia en procedimientos de allanamiento al interior del recinto, durante los cuales los adolescentes son golpeados, rociados con gas pimienta, obligados a desnudarse, revisados en sus genitales y boca, y obligados a realizar sentadillas.
En específico motivaron la acción del instituto, los hechos ocurridos el 25 de abril pasado alrededor de las 22 horas, cuando ingresaron funcionarios de Gendarmería a las habitaciones, aplicando los tormentos relatados por los ocho adolescentes amparados.
Estas situaciones, que serían recurrentes, para el INDH configuran una vulneración del derecho a la seguridad individual de los afectados, poniendo en riesgo su integridad física e incluso su vida, en un contexto de privación de libertad en que el Estado debe garantizar que no se vulneren los derechos de las personas afectadas.
Dentro de lo ordenado por la Corte a Sename y a Gendarmería se encuentra, que dichas entidades tomen todas las medidas necesarias para dar cumplimiento a su deber de resguardar la integridad y la seguridad individual de los menores de edad, no pudiendo Gendarmería en adelante actuar sin el permiso del oficial a cargo del recinto, prohibiéndose además la aplicación de acciones disuasivas como el uso de gases y los desnudamientos.